Aunque mantenemos nuestra esencia, hay características personales que varían y que acaban afectando a las decisiones. Entre los 16 y los 20 años Publicidad Los adolescentes, en general, son cócteles de hormonas, emociones e idealizaciones que nutren el cerebro y lo hacen explotar en innumerables fantasías de película. Por eso, en el caso de las chicas heterosexuales, buscan a ese chico alto, guapo, mayor que ellas y con toque rebelde: un canalla en toda regla. En las ficciones americanas, estos sujetos sacarían pelotas del estadio sin despeinarse. Y es que a ellas les da igual si el chaval es buen tío o no. Lo que quieren es alcanzar su Everest, es decir, gustar al chico popular, generalmente con moto y que juguetea con los límites de la ley. A John Travolta en los años 70 o a Quimi de Compañeros en los
Razones por las cuales hombres jóvenes se enamoran de mujeres mayores Cualquiera se sentiría atraído por una mujer madura, sensible, paciente e inteligente, sin atañer la edad. Mientras una mente joven divaga, una mente madura proporciona equilibrio a una relación. Son conscientes de sus necesidades, deseos, deficiencias y tienen una mejor comprensión de lo que un compañero puede desear. Las mujeres mayores aportan un sentido de apertura, madurez y paciencia que son vitales para que cualquier relación prospere. Exigido a la experiencia y la época, ofrecen mucho para una relación, y es por eso que hoy en día muchos hombres jóvenes se sienten atraídos por las mujeres mayores. Comprenden que ambos necesitan trabajar arduamente y respetar el espacio que divide sus vidas profesionales y personales. Difícilmente se producen malentendidos con respecto a asuntos financieros porque tanto en la relación ganan y tienen la misma dictamen en todos los asuntos. Son mucho experimentadas Dado que las mujeres mayores son las que han entrado en la tercera, cuarta o quinta decenio de su vida, seguramente tienen mucha experiencia en lo que respecta a las relaciones, las citas, el guión íntimo, etc.
A la vez, se mofan de sus intentos por acaparar a todo macho mayor de 30 años que aparece por su lugar de trabajo y de cómo saca las garras si otra se acerca a la botín. Igual que ella, miles de mujeres se preguntan dónde se han enmascarado los hombres de su generación y por qué no consiguen encadenar una relación tras otra, como hacen ellos. Desean a un hombre con el nivel cultural adecuado. María Cruz narra la conversación que mantuvo con una ejecutiva de la industria farmacéutica: Me mostró su preocupación por la dificultad de encontrar una pareja a su edad, tenía unos espléndidos 39 abriles. Pero sobre todo me llamó la atención que destacara que, cuando salía con sus amigas a tomar una copa, si conocían a un grupo de chicos mentían sobre su ministerio. Eran ejecutivas, abogadas o doctoras, y se hacían pasar por peluqueras o cajeras de supermercado para que ellos no salieran huyendo. La testosterona juega muchas veces malas pasadas y vuelve a los hombres muy competitivos, necesitan dominar la situación y, de faceta inconsciente, quieren llevar la batuta. Feed quien considera que esto de ligar a partir de los 40 resulta un trabajo tan arduo que necesita la intervención de un tercero.