Muchas personas experimentan una gran dificultad para encontrar pareja. El ser humano es un animal social por naturaleza, tenemos la necesidad innata de estar acompañados por otras personas y establecer vínculos sociales y afectivos. Así, aunque no todas las personas tienen las mismas necesidades afectivas, por lo general tendemos a buscar cariño. Se trata hasta cierto punto de una convención social, y en ocasiones incluso de una solución instrumental; en este sentido, no son raras las parejas que se forman por mera conveniencia, exista o no amor entre ellos. Muchas veces estas relaciones se basan en el miedo a la soledad, la conveniencia económica, o cualquier otro motivo. Así, aunque existen excepciones, la mayor parte de las personas siente la necesidad de establecer una relación sentimental de pareja. Esto da lugar a que muchas veces, ante la imposibilidad de encontrar a alguien, algunas personas puedan sentirse frustradas. Son muchos los individuos que, de un modo u otro, se encuentran frustrados ante la incapacidad de encontrar a alguien. Sin embargo, muchas veces esta dificultad para encontrar pareja se debe a actitudes que, consciente o inconscientemente, desarrollan estas personas.
Quien se plantea volver al juego de la seducción tras 15 o 20 años de matrimonio puede llegar a sentirse, casi, como una primera tiempo, añade. Otra cosa es plantarse adelante de alguien nuevo. La sexóloga apunta un fenómeno estrechamente relacionado con esa idea: Tras un divorcio o separación, son muchas las mujeres que optan por ponerse implantes mamarios y actuar dieta. Una vez recuperada la aplomo en los encantos propios, o denial tan propios, llega la siguiente pregunta.
Lo intento, pero no acabo consiguiéndolo. Gracias por la atención. La tecnología puede ser un aliado en estos casos. Cada uno puede elegir la suya en función de sus circunstancias y necesidades.